El 8 de noviembre de 1878 se inició la expedición conformada por el monitor “Los Andes”, la cañonera “Uruguay” y la bombardera “Constitución”, para afirmar nuestra soberanía en la Patagonia. Esa pequeña escuadra de río se transformaría en una verdadera y permanente Flota de Mar argentina.
El 1ro de diciembre fue instituido como Día del Comando Naval y de la Flota de Mar.
A mediados de 1878, ante la presencia de buques de guerra chilenos en aguas del río Santa Cruz, lo que amenazaba la soberanía nacional en la región, se dispuso el envío de una División Naval a Santa Cruz, al mando del Comodoro Luis Py, para exhortar a que se retiraran de la zona.
A mediados de 1878, ante la presencia de buques de guerra chilenos en aguas del río Santa Cruz, lo que amenazaba la soberanía nacional en la región, se dispuso el envío de una División Naval a Santa Cruz, al mando del Comodoro Luis Py, para exhortar a que se retiraran de la zona.La División quedó integrada por el monitor “Los Andes”, la corbeta “Uruguay” y la bombardera “Constitución”. Más tarde se agregaron la bombardera “República” y la goleta “Cabo de Hornos”.
Cuando Py y sus hombres arribaron a Santa Cruz, las naves chilenas se habían retirado de la zona.
El 1ro de diciembre de 1878, con la guardia de honor de la tropa del Ejército que había transportado la expedición, al mando del Sargento Mayor Félix Adalid, se izó el pabellón nacional. El honor y la soberanía nacional quedaban asegurados, la Patagonia era, a partir de ese momento, efectivamente argentina.
Las tripulaciones de las tres naves surtas en Cañadón de los Misioneros estaban presentes en el acto, así como también el Subdelegado de Marina en Santa Cruz, el Teniente de Marina Carlos María Moyano y el personal a sus órdenes.
El 20 de enero de 1879, los cadetes de la 1° promoción de la Escuela Naval Militar rindieron su examen reglamentario a bordo de la corbeta “Uruguay”. El 14 de marzo, relevados por la corbeta cañonera “Paraná”, que quedó como buque de estación, las naves de la Expedición del Comodoro Py regresaron a Buenos Aires.
Esta Expedición transformó una pequeña escuadra de río en una verdadera y permanente Flota de Mar argentina.
Durante 1884, se envió una División Expedicionaria a cargo del Coronel de Marina Augusto Lasserre, para establecer dos Subprefecturas Marítimas, una de ellas en Isla de los Estados y la otra en Ushuaia. Hechos que permitieron a la República Argentina ejercer sus derechos soberanos y asegurar la posesión definitiva de estas tierras. Esta expedición hizo flamear por vez primera la enseña celeste y blanca en la bahía de Ushuaia.
Desde entonces la Armada Argentina avanzó con el país y pasó por la época de los acorazados y de los portaaviones, habiendo vivido acciones de guerra durante el Conflicto del Atlántico Sur en 1982 a través de las cuales se perdió al crucero ARA “General Belgrano” y resultó seriamente averiado el aviso ARA “Sobral”.
En años posteriores, la Flota de Mar se renovó incorporando nuevos medios. También, intervino activamente en operaciones combinadas internacionales con las Armadas de diferentes países tales como Estados Unidos de Norteamérica, España, Canadá, Uruguay, Sudáfrica, Paraguay, Chile y Brasil con el que lleva más de treinta años compartiendo experiencias en el Operativo Fraterno.
La Armada Argentina se hizo presente en los episodios relevantes de un mundo con nuevas amenazas participando activamente bajo el mandato de las Naciones Unidas destacando buques al Golfo de Fonseca en Honduras (1990), en la Operación Tormenta del Desierto en el Golfo Pérsico (1991) y en Haití (1994), entre otros.
Fuente: https://gacetamarinera.com.ar/especiales/la-flota-de-mar-corazon-de-la-armada/